Este es un link que me han mandado recientemente y no me resisto a compartirlo.
Es un vídeo (en inglés, siento si esto dificulta) de un periodista ugandés llamado Andrew Mwenda, que habla sobre la ayuda internacional a África, haciendo una mención a la imagen de África dada por los medios de comunicación. Lo que dice es que los medios dan una imagen que es totalmente cierta, pero que no es toda la verdad, se habla de pobreza y de conflictos, cuando de 57 países africanos, solo 6 tienen una guerra civil en curso.
Hace una exposición sobre hacia donde él cree que debe ir dirigida la ayuda internacional. De antemano os digo que es muy crítico con la ayuda internacional, de hecho se refiere a ella como el “negocio de la ayuda” y dice que siempre que vaya encaminada a reforzar las estructuras de un Estado: administración pública, ejército, salud, educación, infraestructuras…estará mal encaminada.
Su teoría se sustenta en que para que un estado pueda desarrollarse, tiene que generar ingresos propios, y recabar dinero de sus contribuyentes, y para conseguir eso, el Estado tiene que proporcionar los mecanismos que posibiliten a los emprendedores del país poner en marcha sus negocios. Sin embargo, dice, ningún estado que reciba la mayor parte de su capital del exterior, va a molestarse en reunirse con estos emprendedores para conocer sus necesidades, porque es más fácil dirigirse al FMI o al Banco Mundial que están dispuestos a financiar el funcionamiento del país.
Pone un ejemplo ilustrativo, el de su propio país, Uganda, que gasta la mayor parte de su presupuesto, es decir, unos 600 billones de shillings en el gasto de la administración pública, que sustenta 333 parlamentarios (hace una broma sobre que necesitan el Estadio de Wembley para reunir a tanto parlamentario), 114 asesores del presidente (que no ven al presidente más que en la televisión), etc. Es decir, entre líneas, que la ayuda posibilita, sustenta y fomenta la corrupción. En conclusión, cualquier hombre o mujer africano inteligente y emprendedor va a dirigirse al mejor negocio que existe en su país, esto es, la administración publica, en lugar de abrir su propio negocio. Es a estas personas a las que él propone incentivar y sobre las que cree que deben ir dirigidos todos los esfuerzos internacionales.
Estoy de acuerdo con mucho de lo que dice y tengo dudas acerca de cómo se podría materializar otra parte, con lo cual me genera dudas también, pero como siempre, se agradecen soplos de aire fresco y nuevas ideas así que por eso lo comparto, por aquello de la inspiración.
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