miércoles, 18 de enero de 2012

Le duele la cara...


Tengo un peluche que tiene vida propia, se llama Primus II y es un gato de raza cruzada entre Persa y Callejero. Podríamos definirlo como resimpático animal. Me da extra bonus de besos para ser un gato y siempre está dispuesto a que le acaricien y le den mimos. No me hago la dura, yo tampoco. Es imposible, es demasiado suave.

Lo creáis o no, mi vida ha cambiado ligeramente, trato de estar más en casa para estar con él, porque le gusta estar con alguien y llora cuando está solito, tiene tres meses, es decir, es un niño de dos años, a los efectos humanos.

Quién me lo iba a decir, que algo a mi entender tan insignificante iba a suponer semejante cambio en la percepción de las cosas y de mi vida, yo que soy la persona menos mascotil que existe…Tengo suerte, es un compi estupendo y es tan guapo que una no se cansa de mirarlo, vivo con Brad Pitt, a los efectos humanos.

jueves, 12 de enero de 2012