miércoles, 27 de febrero de 2013

Rwasmus

Hace mucho que no os cuento nada de la vida en Kigali, será el síndrome este que cuentan mis amigos de Alboan, por el que cuando vas a África una semana, escribes un libro; un mes y escribes un articulo; un año y ya no escribes nada.

Yo llevo cuatro y sigo escribiendo, pero coincido en que cada vez me siento con menos y menos licencia para escribir. Es curioso. Quizá sea por eso el que comente noticias en lugar de contar lo que me pasa a mi. Es más fácil.

En vuestra ración de cotidianidad africana os diré que no ha parado de llover desde la última estación de lluvias, que empezó -corregidme si me equivoco, porque calculo muy mal el tiempo en el trópico donde siempre hace sol-, en octubre, porque debían empezar en septiembre pero se retrasaron. La cosa es que normalmente en enero y febrero para, y no llueve nada, todo se llena de polvo y hace calor. En marzo, se supone que comienzan las lluvias de nuevo. Pero este año no ha parado de llover, en enero y febrero ha hecho calor, pero ha seguido lloviendo. La semana pasada llovió torrencialmente, cayó granizo y murieron cuatro personas en Nyabugogo, el barrio donde está la estación de autobuses en Kigali. La gente no para de hablar del cambio climático y que les va a hacer polvo las cosechas.

En otro orden de cosas, estos últimos, han sido meses un poco extraños en el trabajo. Por si no os habíais enterado, España está en crisis, lo que afecta a todos los sectores, entre ellos las ONGD. Conseguir pasta está siendo cada vez más y más difícil y el modelo de cooperación que conocemos, ya no es, ni será. Esto supone por un lado, que algunas ONG desaparecerán del mapa en su proyección de Peters y por otro, que algunos de nosotros, alegres jipis trabajadores de las ONG, técnicos y técnicas de sede, cooperatos y cooperatas, nos tendremos que dedicar a otra cosa, o a lo mismo pero en otro país. Así que he estado pensando mucho sobre qué podría ser esa otra cosa. No he llegado a ninguna conclusión todavía. Hablaba con mis amigas y comentábamos que una posibilidad sería que España se fuera a la mierda del todo, seamos considerados como país receptor de ayuda de la OCDE, Suecia envíe sus ONG, y a mi me contraten en una ONG sueca como personal local. Este plan no me iría mal. Trabajas en tu país, estas con tu familia y amigos, curras para los suecos, que son mas organizados que nosotros, y pagan mejor que nosotros...Lo único malo, el frío de Siberia-Gasteiz, pero tampoco vamos a ponernos tiquismiquis...somos blancos ricos venidos a menos, así que hay que adaptarse...

Por último, y como conclusión final de mis divagaciones personales, os diré que siendo una persona que ha vivido en Bombay y en Kinshasa, es decir, que puedo vivir en cualquier parte del planeta, por muy lleno de mierda que esté, me gusta vivir en Kigali. Vivir en Kigali es fácil. Es pulcramente limpia, gran parte está asfaltada e iluminada, hay restaurantes estupendos, puedes aparcar en cualquier sitio, el clima es lo mejor del mundo, es verde, es bonita, es manejable como un pueblecito, hay fiestas bastante a menudo y eventos varios muy a menudo, me gusta el curro y por encima de todo, me gusta la gente variopinta que viene y va, los overexcited americanos que todo les parece estupendo, los visitantes temporales que vienen a hacer prácticas y lo dan todo mientras están aquí, los amigos y familiares de los que viven aquí  que vienen por un mes y les flipa tanto que se quedan seis...y los permanentes, los que llevan como yo, dos o más años aquí, con nuestros líos de faldas y nuestros problemas empresariales; nuestros fines de semana en el lago y nuestros safaris y otras excursiones; nuestras bromas y chistes fáciles; nuestras reflexiones sobre el amor, la vida, el optimismo, la suerte y la felicidad; nuestros whatsapp para darnos los buenos días en italiano; nuestras Tradicionales Cenas de los Jueves; nuestros gintonics con o sin cardamomo; nuestro préstamo de oficinas cuando se va la luz; nuestros 'top three' de absolutamente todo; nuestros kinitos 21 aceituno; en fin, rwasmus. Lo escribo para recordarlo, porque si en algún momento me tengo que ir, lo echaré de menos.


2 comentarios:

  1. Por un lado, a mi tambien me pasa, que mi creatividad fotografica y literaria ha, practicamente, desaparecido. Tal vez se pasen por etapas de absorcion de sensaciones, y por otras de emision o de elaboracion... Seguramente rwasmus es tan intenso que acepta mal la digestion de lo sentido, de las percepciones y sentimientos, y de su manifestacion grafica (no hay tiempo pues hay que currar, una cena, una excursion, etc)...

    En cuanto a cosas a anyorar: tambien nuestras casas sobredimensionadas, con jardin y gatos suaves....

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  2. La casa seguro...al gatuli me lo llevo!

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